Karl-Anthony Towns rescata a los Knicks en la primera victoria frente a los Pacers de la final del Este de la NBA

Cuando todo parecía perdido para los New York Knicks, apareció Karl-Anthony Towns. El ala-pívot dominicano estadounidense anotó 20 puntos y capturó ocho rebotes en el último cuarto para evitar una derrota frente a los Pacers que parecía cantada y que habría dejado casi sentenciada la final de la Conferencia Este de la NBA. Con su triunfo (100-106), en el que remontaron una desventaja de 20 puntos, los neoyorquinos se ponen 1-2 en un duelo al mejor de siete partidos frente a los Indiana Pacers y recuperan la fe en sus posibilidades.

Curiosamente, los Knicks se impusieron a domicilio a los Pacers en un partido gris de su estrella, Jalen Brunson, que logró 23 puntos, pero en una serie de seis de 18 tiros de campo (incluido un solo triple en cinco intentos). Towns, con 24 puntos y 15 rebotes, fue el máximo anotador del partido, pero, sobre todo, se echó al equipo a hombros en el momento decisivo, cuando el público de Indiana ya empezaba a ver a su equipo casi clasificado para la final de la NBA.

En el primer partido de la serie se vivió una remontada milagrosa de Indiana, de las que quedan para la historia de la NBA, que permitió a los de Indiana ganar en la prórroga. En el segundo, el duelo se decidió también en el último minuto. El tercero no iba a ser menos. Este domingo, arropados por su público, los Pacers se mostraron superiores a los Knicks en los tres primeros cuartos, pero sucumbieron en el último en otro partido que se decidió al límite.

El primer cuarto se cerró con un 30-26 a favor de los locales, que habían llegado a ir cinco puntos por detrás. Las diferencias fueron estrechas hasta mediados del segundo cuarto, cuando se rompió el partido por primera vez. Una jugada clave marcó la frontera. Los árbitros pitaron una falta personal de Haliburton a Karl Anthony Towns cuando era el ala-pívot de los Knicks el que estaba agarrando al base de Indiana.

Carlisle solicitó la revisión y los árbitros le dieron la razón. Tras esa jugada, los Pacers lograron un parcial de 13-0 con el que llegaron a lograr una ventaja de 20 puntos. Al descanso se llegó con 58-45 en el marcador y cierta sensación engañosa de que la victoria de Indiana era casi inevitable.

Los Pacers no perdonaban al contraataque las frecuentes pérdidas de balón de los Knicks, carentes de balance defensivo. El base neoyorquino, además, estaba logrando un bajísimo porcentaje en tiros de campo y peor aún en triples, en uno de sus peores partidos en los playoffs. Para terminar de empeorar las cosas, Brunson y Towns se cargaron pronto con cuatro faltas personales, lo que limitaba su participación y su agresividad defensiva. Aunque, en realidad, por una vez, los Knicks jugaron mejor con su base titular en el banquillo que sobre la cancha.

El tercer cuarto fue un toma y daca constante, pero siete puntos consecutivos de Miles McBride permitieron acortar la distancia a 80-70 a falta del último cuarto y con la mala noticia para los Pacers de la lesión de Aaron Nesmith, el defensor más agresivo del equipo.

En el inicio del periodo decisivo, llegó el momento de Karl-Anthony Towns, casi desaparecido hasta entonces. Asumió toda la responsabilidad ofensiva. En solo cuatro minutos, el fichaje estrella de los Knicks para esta temporada anotó 15 puntos y dio una asistencia, con lo que puso a los neoyorquinos por delante (87-85), gracias también a una redoblada intensidad defensiva. Los Pacers solo anotaron 22 y 20 puntos en los últimos dos cuartos.

A falta de 1:20, el marcador marcaba empate a 98, y Brunson encestó un lanzamiento clave que adelantaba a los suyos. Indiana no encontró la canasta en su ataque y los neoyorquinos, a diferencia del primer partido, no perdonaron en los tiros libres, lo que les permitió aumentar su ventaja hasta el 100-106 final.

Durante el partido se homenajeó al español Alex Palou por su victoria de este domingo en las 500 Millas de Indianápolis. La carrera es gafe para los Pacers que, con la derrota de este domingo, han perdido las cuatro veces que han jugado el mismo día del gran premio.

El cuarto partido de la serie se disputará este martes, también en Indianápolis. El quinto será en Nueva York y, en caso de ser necesarios, el sexto volvería al Madison Square Garden y el séptimo, a Indiana.