

El Valencia y el Espanyol son tan parejos que confluyen en un empate
El empeño del equipo de Carlos Corberán al calor de Mestalla niveló el choque después de una primera parte dominada por el talento de Edu Expósito


El Valencia y el Espanyol tuvieron minutos de sobra para demostrar por qué están protagonizando dos de las grandes remontadas de la temporada. Son dos equipos, dos históricos, que han crecido en la segunda vuelta hasta encontrar el fútbol que les empuja hacia puestos más nobles después de semanas de sufrimiento. Los dos tuvieron sus momentos de brillantez, ráfagas de buen juego, y tan parejo fue su duelo que el partido acabó en empate, insuficiente para sellar la salvación.


El Valencia acusó en la primera mitad la falta de rodaje en partidos en los que el rival te regala el balón. Después de tantas semanas en modo supervivencia, al centro del campo le faltó velocidad para sorprender a un Espanyol que es feliz acumulando efectivos cerca de su área. El conjunto de Manolo González ataca poco, pero lo hace con mucho criterio, especialmente cuando el balón pasa por las botas de terciopelo de Edu Expósito. Se ha hecho mayor el niño de Cubelles que creció embobado por el juego de Alessandro Del Piero, y ahora, ya de blanquiazul, proyecta a sus delanteros con elegancia pero también tiene la capacidad de sacar la zurda para enseñarle a Mamardashvili dónde tiene uno de los postes.
El Espanyol y el Valencia son los dos equipos que mejor han reaccionado después de un inicio de temporada preocupante. Estos dos históricos del fútbol español vienen desde muy abajo pero avanzan a la velocidad de los grandes.
El Valencia flaquea si Javi Guerra no se hace fuerte en la línea de tres cuartos o si André Almeida no conecta con sus compañeros. Entonces queda a merced de los fogonazos de Diego López y Luis Rioja. Eso es un problema cuando enfrente tienes a un equipo que se repliega y se defiende con mucho arte. Tiene muchas virtudes este Espanyol. Almeida debía saberse una de ellas cuando protestó airadamente después de una falta aparentemente inocente en un lateral de su área. Una de las especialidades de Expósito. No tardó en comprobarlo el portugués. El centrocampista lanzó un balón con mucha intención a la olla y ahí metió el pie Javi Puado para desviar la trayectoria y marcar su undécimo gol esta temporada.
Corberán adelantó la presión en la segunda parte. Ya no valía esperar. Sin Sadiq, sancionado, ni grandes virtuosos en la punta, tocaba salir a morder. La actitud encendió a la afición de Mestalla, donde el Valencia ensancha sus espaldas y parece jugar con tres pulmones. Javi Guerra se siente más cómodo con compañeros por delante. No tardó el Espanyol en experimentar lo que tantos otros en este estadio. Luis Rioja, con calma, con temple, hizo una genialidad que permitió a Javi Guerra marcar el empate.
A Corberán le gusta la asimetría. Rioja está en un extremo, a pie cambiado, y deja premeditadamente vacía la banda izquierda, una autopista para José Luis Gayá, pues prefiere que Diego López busque su momento al borde del área. El Valencia se fue haciendo con el partido y, poco a poco, empezó a atornillar al Espanyol, que necesitó otro vuelo majestuoso de Joan García para sostener el empate.
Clasificación | PT | PJ | PG | PE | PP |
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12
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39 | 33 | 10 | 9 | 14 |
13
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39 | 33 | 10 | 9 | 14 |
14
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39 | 33 | 9 | 12 | 12 |
15
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37 | 33 | 9 | 10 | 14 |
16
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35 | 33 | 9 | 8 | 16 |
Clasificación | PT | PJ | PG | PE | PP |
---|---|---|---|---|---|
11
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41 | 33 | 10 | 11 | 12 |
12
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39 | 33 | 10 | 9 | 14 |
13
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39 | 33 | 10 | 9 | 14 |
14
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39 | 33 | 9 | 12 | 12 |
15
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37 | 33 | 9 | 10 | 14 |
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