Probamos los mejores grifos giratorios para la cocina

Dependiendo del grifo que tengamos en la cocina, podremos hacer las tareas con mayor o menor comodidad. No es lo mismo un grifo fijo que uno giratorio, en el que el caño se mueve hacia los lados o hasta los 360 grados.

Este último tipo es una opción muy recomendable para disponer de más libertad de movimiento si el fregadero es pequeño, si se tienen dos e, incluso, para limpiar la pila más fácilmente con el propio giro del grifo. Estos modelos giratorios cuentan con distintos precios y se montan en pocos minutos.

Económico: GRIFEMA Irismart G4008

Para quién es: para los que buscan buena calidad-precio.

Por qué lo recomendamos: Es el más económico de toda la comparativa. Es de acero inoxidable con un tipo de acabado que no deja marcas de agua ni de los dedos. Viene bien empaquetado y con unas instrucciones con las que se puede montar el grifo en 15 minutos. En mi caso lo hice con la ayuda de mi pareja (ya que nunca había montado un grifo en la cocina) pero los pasos resultan muy fáciles de seguir. Los latiguillos que van conectados a la llave del agua son bastante largos (unos 50 cm) por lo que cuentan con bastante longitud para instalarlos sin tener que realizar ningún empalme entre ellos.

Una vez instalado, el caño es bastante alto (270 mm) por lo que resulta muy cómodo y no molesta nada. Gira hasta 360 grados así que si se tienen dos pilas es muy práctico. En mi caso, que solo tengo una, me resultó útil para moverlo de posición cuando estaba fregando algo voluminoso, por ejemplo, o para limpiar el fregadero con más comodidad.

Es monomando y funciona de forma suave con un pequeño toque con la mano (o incluso con el brazo si tienes las manos ocupadas). También ofrecen un par de funciones para ahorrar agua: dispone de un sistema antisalpicaduras y siempre arranca en frío, lo que evita que el agua fría y caliente se mezcle de primeras.

Sus puntos débiles: nada destacable, aunque hay que leer bien las instrucciones antes de montarlo.

Ligero: Grohe BauEdge

Para quién es: para los que buscan un diseño práctico.

Por qué lo recomendamos: Gira 360 grados a la perfección, es monomando y está fabricado en metal. Además, incluye todo lo necesario para instalarlo. Se agradece que las roscas tengan el tamaño estándar (3/8″) ya que así resulta más fácil de instalar. Es bastante ligero por lo que es muy manejable tanto a la hora de montarlo como para utilizarlo en el día a día. Tiene un tacto suave y el monomando, con una palanca convencional, gira bastante bien (apenas hay que hacer fuerza para moverlo de un lado a otro).

El caño tiene una altura considerable (330 mm), con forma de C y me resultó muy cómodo para llenar las ollas o las cazuelas en el propio fregadero. Cuenta con un filtro antisalpicaduras y en su interior dispone de una tecnología que garantiza un control tanto de la temperatura como del volumen del agua. Asimismo, los conductos de agua internos permiten que el agua esté libre de plomo y níquel.

Sus puntos débiles: el grifo pesa muy poco, así que puede resultar un poco ‘endeble’ si se compara con otros más robustos y pesados.

Minimalista: Teka ARK 915

Para quién es: para los que buscan un diseño elegante.

Por qué lo recomendamos: este es uno de los diseños más elegantes de todos los grifos giratorios analizados. Es de acero inoxidable y brilla muchísimo cuando está limpio, así que decora estupendamente esa parte de la cocina. Siguiendo las instrucciones que vienen incluidas, la instalación también resulta bastante sencilla. En cuanto al caño, de 220 mm, gira en distintas direcciones y lo hace de forma muy suave y llegando a todas las partes del fregadero (si es pequeño como es mi caso).

El monomando también funciona muy bien, incluso es posible ajustar de forma muy precisa el control de la temperatura: es muy intuitivo y con tan solo moverlo para un lado u otro va cambiando de forma progresiva la temperatura en pocos segundos. También dispone de un aireador anticalcáreo para evitar la acumulación de depósitos de calcio en el caño. Durante las pruebas apenas lo noté, pero imagino que es algo que se aprecia con el tiempo. No obstante, y aunque supuestamente esta pieza también sirve para mezclar el aire del agua y evitar las salpicaduras, es uno de los modelos que más salpica de la comparativa.

Sus puntos débiles: salpica bastante si el grifo se abre al máximo.